05 febrero 2018

Cambio climático


Es una realidad que afecta a todas las sp planeta tanto sea del reino animal, vegetal o fungi, del cual es un hecho que la mayoría de la población se niega a aceptar. No podemos observar el clima directamente lo único que vemos es el tiempo, pero el tiempo medio. A lo largo del curso de los años se releva un dato que es el clima y hay que vigilar al hombre no al planeta.

El tiempo es difícil de predecir como los humanos pero el clima es predecible. El clima ha cambiado muchas veces a lo largo de la historia de la tierra pero siempre en respuesta a una fuerza global.


Ahora mismo la fuerza más poderosa que controla el cambio climático es el aumento de CO2 por la quema de combustibles fósiles que atrapan más calor procedente del sol y toda esa energía tiene que ir a algún sitio. Una parte calienta el aire, la mayor parte acaba en los océanos, los océanos de la tierra se están calentando.

Resulta más evidente la consecuencia del cambio climático en el Océano Ártico y en las zonas que lo rodean. Estamos perdiendo el hielo marino durante el verano en un lugar al que prácticamente nadie va, ¿pero que más nos da que no haya hielo alrededor del Polo Norte?.

El hielo es la superficie natural más brillante de la Tierra y las aguas más abiertas de los océanos la más oscura, el hielo refleja la luz procedente del sol y la envía de vuelta al espacio, el agua absorve dicha luz y se calienta lo que derrite el hielo aún más y deja expuesta una mayor superficie oceánica para que siga absorviendo aún más luz solar. Esto es lo que se suele llamar en terminos científicos un buque de retroalimentación positiva es uno de los muchos mecanismos naturales que magnifican cualquier calentamiento causado solo por el CO2.


Cuando nacieron nuestro padres el permafrost se derretía a unos 6 metros por año, hoy en día se está derritiendo a unos 15 metros por año.

El océano Ártico se está calentando a una velocidad cada vez mayor así que permanece sin hielo durante más tiempo a lo largo de todo el año y eso conlleva que la costa esté más expuesta a la erosión de las tormentas que además cada vez son más fuertes, otro efecto del cambio climático.


Las zonas del norte de Alaska, Siberia y Canadá están compuestas sobre todo por permahielo un suelo que lleva congelado todo el año desde hace milenios. Contiene grandes cantidades de materia orgánica, hojas y raíces antiguas de plantas que crecieron hace miles de años. Como las regiones del Ártico se están calentando más rápido que cualquier otra parte de la tierra el permahielo se está derritiendo y su contenido se está pudriendo, como si desenchufáramos un congelador.

El hielo que se está derritiendo está liberando a la atmósfera dióxido de carbono, metano e incluso un gas de efecto invernadero más potente aún y esto provoca un calentamiento aún mayor y supone otro ejemplo de mecanismo de retro alimentación positiva.


El permahielo de todo el mundo almacena suficiente carbono como para liberar más del doble del Co2  del que hay ahora mismo en la atmósfera. A la velocidad a la que vamos a finales de este siglo el calentamiento global podría haber liberado su totalidad puede, puede que estamos llevando el cambio climático hacia un punto de no retorno, hacia un derrumbe impredecible.

El aire, el agua y la tierra se están calentando así que el calentamiento global está ocurriendo. Pero quizá no sea culpa nuestra, quizá solo sea la naturaleza, quizá sea el sol... No no es el sol


Llevamos décadas monorotizando el sol muy de cerca y la cantidad de energía solar que emite no ha variado es más la tierra se calienta más de noche que de día y más en invierno que en verano eso es exactamente lo que esperamos del calentamiento provocado por el efecto invernadero pero lo opuesto a lo que provocaría la cantidad de energía solar emitida.

Ahora podemos afirmar más allá de cualquier duda razonable que nosotros estamos cambiando el clima, el sol no es el problema pero es la solución y lo llevamos sabiendo desde hace mucho tiempo, mucho más de lo puedan imaginar .


Por último cabe destacar que de ser capaces de adaptar nuestro comportamiento a los retos que se nos presentan es una definición de inteligencia igual de buena que cualquier otra.

Si nuestra inteligencia superior es el sello de nuestra sp entonces deberíamos utilizarla al igual que el resto de seres vivos utilizan sus ventajas distintivas para asegurarse de que su descendencia prospere, de que su herencia pase de generación en generación y de que la estructura de la naturaleza que nos mantiene esté protegida.


La inteligencia humana es imperfecta esta claro y es bastante reciente. La facilidad con la que puede ser engatusada, abrumada o trastocada por otras tendencias fuertemente arraigadas a veces disfrazadas como si fuesen la luz de la razón resulta preocupante.

Pero si la inteligencia es nuestra única ventaja debemos aprender a utilizarla mejor, a refinarla, a entender sus limitaciones y deficiencias, a utilizarla como los gatos utilizan el sigilo antes de abalanzarse sobre algo o como los insectos palo utilizan el camuflaje para convertirla en la herramienta de nuestra supervivencia.


Si hacemos eso podemos resolver prácticamente cualquier problema al que tengamos que enfrentarnos e los próximos 100.000 años.